Panorama Latino.- El Acuerdo Nacional Maíz Tortilla se presenta como una estrategia estructural para atender un problema recurrente en la economía mexicana: la volatilidad en el precio de un alimento básico. Más allá de un pacto temporal, busca sentar bases de estabilidad en la cadena productiva.
Con apoyos a productores, tortillerías y consumidores, el acuerdo apunta a fortalecer la soberanía alimentaria, la formalización del sector y la competitividad del mercado, integrando incentivos económicos, normas de calidad y beneficios sociales.
En este sentido, el Acuerdo Nacional Maíz Tortilla busca estabilizar el precio de la tortilla, proteger a los consumidores y garantizar ingresos justos para productores y tortillerías.
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), este acuerdo tiene el objetivo de reducir gradualmente en 5 % el precio de la tortilla en los próximos seis meses.
Acuerdo Nacional Maíz Tortilla: objetivos y alcance
El Acuerdo Nacional Maíz Tortilla establece un marco de cooperación voluntaria entre productores, harineras y tortillerías. Con ello se busca un comercio ordenado, competitivo y transparente, respaldado por la Norma Oficial Mexicana NOM-187 que asegura calidad e higiene.
Además, esta iniciativa pretende dar certidumbre al consumidor final, a la par que incentiva la formalidad en el sector. Al garantizar precios justos y accesibles, el gobierno apuesta por fortalecer el derecho constitucional a la alimentación suficiente y de calidad.
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Beneficios para productores, tortillerías y familias
El gobierno federal anunció que el Acuerdo Nacional Maíz Tortilla ofrece beneficios tangibles para cada eslabón de la cadena productiva.
- Productores: reciben un precio justo por su maíz mediante programas de Alimentación para el Bienestar.
- Tortillerías: acceden a maíz blanco nacional a precio preferencial, descuentos en harina y opciones de financiamiento.
- Consumidores: obtienen tortillas con estándares de calidad a precios más accesibles.
Asimismo, las tortillerías que se adhieran al acuerdo recibirán un distintivo oficial que las acreditará como negocios confiables, además de promoción en el registro nacional de tortillerías con precio justo.
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Acceso a insumos y financiamiento
Con el Acuerdo Nacional Maíz Tortilla, las tortillerías participantes podrán acceder hasta a 25 mil toneladas de maíz blanco nacional a un precio de 6,000 pesos por tonelada. El producto será entregado en Centros de Acopio de Alimentación para el Bienestar.
Igualmente, las harineras Gruma, Minsa y Harimasa ofrecerán descuentos en harina de maíz nixtamalizada.
A esto se suma la posibilidad de recibir financiamiento a través de intermediarios vinculados con FIRA, facilitando recursos para modernizar y expandir operaciones.
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Capacitación y formalización del sector
Otro de los pilares del Acuerdo Nacional Maíz Tortilla es la capacitación. Las tortillerías adheridas podrán integrarse al programa Jóvenes Construyendo el Futuro, fungiendo como centros de aprendizaje. Los beneficiarios recibirán formación con estándares de competencias laborales.
Además, el registro oficial permitirá ubicar a las tortillerías que cumplen con los criterios de precio justo, brindando visibilidad y confianza a los consumidores, a la vez que fomenta la formalización de los negocios.
Un acuerdo para toda la cadena maíz-tortilla
El gobierno de México subraya que, al sumarse al Acuerdo Nacional Maíz Tortilla, gana toda la sociedad. El productor obtiene ingresos estables, la tortillería fortalece su operación y las familias mexicanas aseguran acceso a un alimento esencial a precio justo.
La meta es que esta estrategia genere prosperidad compartida y que cada tortilla elaborada bajo este esquema represente el esfuerzo de toda la cadena productiva, desde el campo hasta la mesa de los hogares.
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– ND